viernes, febrero 20, 2004

Porque He visto las mejores mentes de mi generación destruidas por la mediocridad, saciadas, pasivas, pudorosas, ocultándose bajo la luz del sol por las calles de la suciedad
buscando ser aceptados.
Porque busco a mi hermanos para vomitar palabras pero no los encuentro.
Porque mi existencia es más profunda que un viento de otoño que arrastra hojas muertas de los árboles que esconden vida en lo más profundo de sus duras cortezas.
Porque soy más fuerte que un sueño fugaz.
Porque mi reminiscencia es más que un recuerdo, es un pensamiento físico, algo que se siente, como el dolor o el placer.
Porque me niego a morir, porque salí de la burbuja de aire puro en el fondo del río que lava la mierda de la gente.
Porque he flotado hasta ustedes por el espacio inmaterial y me he convertido en palabras que por capricho mío, retando al destino, estoy en sus computadoras y ustedes en mis pensamientos.
¿Por qué?
Porque puedo
Porque soy el encargado de vigilar que los niños no caigan en el barranco mientras juegan en un campo de centeno.

martes, febrero 17, 2004

Te extraño en las tardes,
quizás no es amor
lo que me hace buscarte.
Las desiciones siempre llegan tarde,
las piezas que quedan jamás encajan.

Viajando en la luz
te quiero abrazar...
un beso perfecto,
envuelto en los sueños
de inútiles noches.

Confusos recuerdos,
colores santos.

Yo sé muy bien
jamás me entendiste
y no lo pretendo.
Dulce es este viento,
sopla en mi corazón,
arrastra olvidos
y no regresa.

Quizás no es amor.

Cambiar las palabras,
mejor no jurar
promesas cerradas.
Cambiar las palabras,
quizás no es amor.
C o l o r e s s a n t o s.